La finalidad de este gran invento para la sociedad no es otra que el transporte de una persona, por lo que nos remontamos hasta el 4000 ac para encontrar su origen, surgida de la colocación de unas simples ruedas a una silla para el desplazamiento de personas.
La primera ilustración registrada data del 525 ac, se trata de un grabado chino que muestra un sillón con tres ruedas, preparado para ser impulsado por otras personas.
También en china, ya en el siglo III dc, inventan la carretilla con el objetivo de transportar a sus enfermos a un lugar llamado “La fuente de la juventud” siguiendo así con un acto de cultura y religión de esa época.
Años después, se expande la idea hasta las antiguas Grecia y Roma, donde ya aparecían relatos de cómo movían a los enfermos al exterior para tomar el aire con un dispositivo con ruedas.
En un dibujo bajo la fecha de 1595, se observa como Felipe II se encuentra sentado en una silla de ruedas que le fabrica un inventor desconocido hasta el momento.
Esta silla estaba equipada con cuatro ruedas pequeñas, un reposapiés y respaldo reclinable, un diseño con elementos que hoy día mantenemos.
En un salto hasta el año 1665, encontramos la primera persona que inventa un vehículo autopropulsable para su propio uso. Este hombre se llamaba Stephen Farfler, un alemán que tenía entonces 22 años y era relojero.
En la imagen que adjuntamos a continuación en la parte izquierda, podemos ver que este vehículo tiene un sorprendente parecido a las actuales handbikes.
A la derecha, se puede ver la silla que revolucionará el mercado desde 1783 hasta el siglo XIX. La silla ‘Bath’ se inventó en la ciudad inglesa que lleva su nombre, por John Dawson. Como no era demasiado cómoda en sus inicios, fueron añadiéndole mejoras enfocadas sobre todo al confort del usuario como el respaldo y el resposapiés ajustables.
Entre 1867 y 1875 se siguieron añadiendo mejoras a la silla ‘Bath’, apareciendo elementos importantes como los aros de propulsión o las ruedas de goma.
En 1916 nos detenemos para fijar un acontecimiento muy importante: se fabrica en Londres la primera silla de ruedas motorizada, una silla manual adaptada con algunos engranajes algo complicados de manejar pero que se fueron puliendo con los años añadiédole tracción directa y sistemas de control más precisos.
El crecimiento más exponencial, ha venido ligado a las últimas décadas, donde nuevos materiales han mejorado el rendimiento de la silla, llegando incluso al punto de poder adaptarla a todas y cada una de las necesidades de una persona con movilidad reducida.
Te preguntarás si tras este recorrido por la historia, hay algo más por hacer para mejorar el rendimiento de una silla de ruedas, y podemos asegurarte que sí. Para el futuro las nuevas novedades serán wi-fi, GPS, sensor de humedad, sistema de posición horizontal y motor eléctrico…y por supuesto nosotros estaremos preparados para adaptarnos a vuestras necesidades con adaptaciones de vehículos para personas con movilidad reducida
